Navegar sobre una zona que no cuente con marcas físicas sobre las características o límites del área, puede suponer una complicación y un gran riesgo para la embarcación y sus tripulantes. Para guiar a los navegantes por el agua, se utilizan las señales de balizamiento, en Alaymar te explicamos qué son y qué tipos hay.
El balizamiento marítimo es un conjunto de normas pensado para señalizar los canales navegables o los peligros en el mar, es decir, sirve de ayuda para los marineros. Es internacional y se regenta por lo que ordena la Asociación Internacional de Señalización Marítima (IALA). El sistema se divide en dos: el A y el B, cuya diferencia se presenta en las líneas laterales. En Europa utilizamos el sistema A.
¿Cuáles son las marcas de balizamiento marítimo?
Durante la navegación, principalmente cuando nos encontramos cerca de puertos, zonas recalada o canales, se encuentra en el mar un conjunto de indicaciones flotantes que son equiparables a las señales de tráfico de las carreteras convencionales. Estas son las señales marítimas de balizamiento
Para cumplir este propósito informativo de una manera completa y visual, tratan de abarcar todas las variables posibles que puedan influir en la seguridad de la navegación. Las principales funciones son:
- Informar sobre la profundidad del agua
- Advertir la presencia de algún peligro o complicación
- Marcar zonas de navegación especiales
- Delimitar los rumbos
- Indicar zonas navegables y aguas adyacentes
- Hacer ver la entrada a zona de recalada o puertos
Tipos de balizas
Ahora que sabemos qué peligros pueden indicar las señales de balizamiento, es momento de saber que tipo de marcas hay.
Por un lado, están las marcas laterales, utilizadas para marcar ambos lados de un canal. Encontramos también las marcas de bifurcación, aquellas que indican el camino principal de un canal cuando este se bifurca. Por otro lado, situamos las marcas de peligro aislado, las cuales señalan la presencia de un peligro pequeño dentro de aguas navegables. Las marcas cardinales, les sirven al navegante saber por donde están las aguas más profundas, en las que puede haber peligro. Y, por último las marcas especiales, que localizan condiciones especiales en el mar, como zonas reservadas a recreo o militares.